La época de Teodosio de Teodosio propició que la Iglesia desarrollase un poder tal que la vida del Imperio y su propia descomposición aparecen íntimamente vinculados a ésta.
Tras ocho años de guerra ininterrumpida (58-51), cuyos detalles son universalmente conocidos gracias a sus propios Commentarii de bello Gallico, tan brillantes como parciales, César conquistó un territorio de más de medio millón de kilómetros cuadrados, con un escalofriante balance: 800 pueblos saqueados, grandes regiones devastadas, un tercio de la población masculina muerta, otro tercio esclavizado y un gigantesco tributo de cuarenta millones de sestercios.
La figura de Alejandro Magno quizá sea de las más atractivas de la Historia.